No vamos a la Marcha Federal, cuyos dirigentes piden dádivas para suavizar el Ajuste mientras boicotean el Paro General
El viernes 1 arribará a CABA la “Marcha Federal”, organizada por CCC, CTEP y Barrios de Pie, cuyos dirigentes trabajan para el Vaticano levantando una política de “humanización” de los planes de Ajuste capitalistas. Por esto, a pesar de que sus referentes declaran la necesidad de “hacer frente a este modelo de ajuste, precarización laboral y hambre” (Ámbito, 30 de marzo) su principal preocupación no es otra que la de conseguir algunos paliativos para profundizar su estrategia de contención de la bronca obrera y popular.
“Desde Posadas, el dirigente de la CCC Juan Carlos Alderete dijo hoy en declaraciones a Radio Continental que "la prioridad número uno de nuestros reclamos es la ley alimentaria, aunque todas son importantes y están relacionadas… Además, las cooperativas sociales quieren ingresar a la pequeña y mediana obra pública en distintas provincias que promueve el Gobierno para que al participar directamente podamos generar trabajo a los compañeros", detalló.” (La Nación, 28 de mayo)
En el mismo diario, otro de los organizadores de la Marcha Federal - el “gringo” Castro - ratifica esta orientación: “En la misma línea, el dirigente de la CTEP Esteban Castro fundamentó la necesidad de sancionar el proyecto de la ley de emergencia alimentaria en que, "en un país donde se produce alimentos para 400 millones de personas en el mundo, los 40 millones de argentinos deben tener garantizados el alimento … La iniciativa incluye un relevamiento para detectar casos de malnutrición o en riesgo de estarlo para brindar asistencia mediante bonos alimentarios.”
"La situación económica y social es muy mala y ha empeorado mucho en las últimas semanas. Además, tenemos el ajuste y el FMI en el horizonte. La Marcha Federal no solo busca decirle al Gobierno que cambie el rumbo, sino que también plantea propuestas concretas para solucionar los problemas urgentes que se viven en los barrios populares", expresó Gildo Onorato, secretario de políticas sociales del Evita y dirigente de CTEP. (Infobae, 31 de mayo)
De acuerdo a lo expresado por Onorato, “Las cinco leyes que ya ingresaron a la Cámara de Diputados - por iniciativa del Interbloque Movimiento Evita-Libres del Sur - son las siguientes: Emergencia Alimentaria, Integración Urbana, Infraestructura Social, Agricultura Familiar y Ley de Adicciones”. Ninguno de estos proyectos cuestiona las bases o algunos aspectos del estado capitalista colonial argentino ni, mucho menos, los intereses de los grandes monopolios, que habría que expropiar para garantizar estas demandas.
Las fuerzas que integran el FIT y algunas otras organizaciones han decidido acompañar la marcha, especulando con que la movilización cambie de contenido, ya que se producirá inmediatamente después del veto presidencial a la “Ley Antitarifazo” votada por las dos cámaras legislativas y en el marco de uno proceso de luchas y de odio creciente contra el gobierno y sus políticas. Por eso, el Partido Obrero, que es la principal fuerza del FIT, llama a marchar para “repudiar el veto” y exigir el Paro Nacional.
Desde nuestro punto
de vista, no nos parece correcto marchar con la Ctep y sus aliados burocráticos
y patronales, ya que el programa que levantan no solo no atenta ni contra el Ajuste,
sino que propone una serie de medidas,- que de imponerse sólo servirían para “suavizar”
sus efectos. Además, ninguno de sus dirigentes tiene la menor intención de organizar
un Plan de Lucha serio, porque todos coinciden en que “haya 2019”, garantizando
que Macri llegue a las elecciones y boicoteando cualquier posibilidad de lucha
extraparlamentaria más o menos consecuente. ¡En el palco de la marcha estarán
buena parte de los enemigos del Paro Nacional Activo y del Argentinazo!
La izquierda, en vez
de gastar energías y confundir a las bases obreras y populares participando en
este tipo de marchas, debería impulsar una agenda propia de lucha, mediante la
convocatoria de una Asamblea Nacional de Trabajadores que vote medidas de
acción directa y un programa independiente. En ese sentido, el “encuentro”
obrero convocado por el SUTNA y otros gremios combativos para fines de junio,
que es una buena iniciativa, debería adelantarse debido al agravamiento de la
crisis del régimen y el salto en la bronca obrera y popular.
Comentarios
Publicar un comentario